Conócete, acéptate, supérate… San Agustín
Manteniendo en todo momento ideas positivas y creyendo fielmente que los cambios son posibles cuando empezamos desde lo micro para luego modificar lo macro, muchas personas, colaboran con la problemática ambiental integrando en su estilo de vida algunos hábitos que permitan generar un menor impacto de nuestras acciones en el medio ambiente, en otras palabras buscan adoptar una vida verde.
Sin embargo, es común que esta intención se cohíba por la presencia de obstáculos como el temor a ser juzgado por los demás, la falta de información sobre el tema y la ausencia de entes que contribuyan a dar continuidad a nuestras iniciativas, entre otros.
Es un hecho la influencia que tienen las personas que forman parte de nuestros grupos sociales en el reforzamiento de nuestras conductas. Los individuos buscan ser aceptados por sus pares en la formación de grupos; si alguna persona en su entorno hace alguna crítica a su comportamiento y el individuo no posee una fuerte convicción acerca de lo que hace sentirá la necesidad de modificar sus acciones para no ser criticado. En otras palabras, el individuo debe manejar la información adecuada para afianzar el por qué de sus decisiones y así podrá defender su punto de vista con propiedad frente a las críticas que su comportamiento pueda generar. Es importante hacer conciente el motivo por el cual actuamos de una determinada manera, así como, reafirmar nuestro carácter y valores para poder adoptar actitudes con voluntad y no dejar contaminar éstas con actitudes pesimistas.
Los cambios en general no se dan de un día para otro y menos tomando en cuenta esta temática donde es necesario la modificación de conductas. En este caso será común recibir criticas o comentarios pesimistas que intenten juzgar o socavar nuestro comportamiento por personas incrédulas o insensibles a lo que les rodea.
A medida que las personas se acepten a sí mismas como consumidores ecológicos y pregunten o exijan información sobre el tema el mundo se irá adaptando a esa nueva era. Recordemos la frase “el cliente siempre tiene la razón”, en ella se refleja la importancia del consumidor dentro del sistema de comercio, el mundo se mueve en torno a las exigencias del consumidor, los productores buscan generar necesidades en los consumidores para poder vender sus productos, pero a su vez adaptan dicho producto a las exigencias del mercado, por lo tanto si el consumidor entiende esto y empieza a demandar productos con un envase básico, que a la vez sea retornable, reciclable y/o que provengan de materiales ya reciclados, las empresas empezarán a cambiar su tecnología de producción y estrategias de mercado para adaptarse éstas exigencias.
Por último, las personas pueden estar interesadas en reciclar, pero muchas veces lo hacen sólo en su casa y no en la oficina o resto de ámbitos donde se desenvuelve su día a día; suele suceder que no manejan suficiente información sobre cómo reciclar adecuadamente y por último, aunque reciclen, una vez estos desechos sean sacados de la casa no existe un ente que los procese adecuadamente o no se maneja información suficiente sobre estos.
Debemos manejar información para superar estos y otros obstáculos, así como crear estrategias necesarias para suplir la ausencia de dichos entes o exigir su presencia a los organismos competentes.
